Hace unos años, la cocina era ese espacio de la vivienda olvidado y sin importancia, pero en la actualidad es sin lugar a dudas uno de los espacios más importantes dentro del hogar, pues en él hacemos el día a día con nuestra familia y/o amigos.

La distribución de la cocina ha ido evolucionando al igual que las costumbres, pasando de tener la típica cocina convencional formada por módulos altos, bajos y una encimera muy reducida, hasta las cocinas más innovadoras y estéticas. En la actualidad, la posibilidad de contar en la cocina con una isla ofrece múltiples beneficios prácticos y atractivos.

Una isla en la cocina permite en principio el almacenaje de menaje de cocina, electrodomésticos, … a la vez que ganamos un espacio extra para cocinar. La idea de colocar una isla nos da la oportunidad de crear un espacio multifuncional, que te permite comer, cocinar, limpiar y preparar alimentos, socializar, hacer los deberes escolares de los más pequeños e incluso poder consultar alguna receta desde tu portátil.

En primer lugar, se debe tener muy claro que uso se quiere sacar para que tu isla sea un aliado perfecto en tu cocina. Es importante tener en cuenta el espacio que queda entre la isla y el resto de muebles, debiendo quedar al menos un metro entre ellos. En caso de no tener espacio suficiente como para colocar una isla, otra opción es sacar una península a los muebles de la cocina. Las dimensiones mínimas de isla de la cocina no están establecidas por una normativa y dependerán del uso que quieras hacer de ella en el día a día, aunque es recomendable, para que la isla sea práctica, que la superficie de la encimera no sea inferior a 100 x 100 cm al menos, la anchura mínima serían unos 60 cm y la altura habitual estándar de 90 cm, que es ideal para cocinar o preparar alimentos, aunque si se quiere utilizar como zona para comidas, es recomendable una altura entorno a los 110 cm.

En la elección de los materiales de la isla de la cocina, dependerá del estilo que se quiera conseguir: rústico, industrial, minimalista, etc… A continuación, mencionamos los más populares y demandado en la actualidad como son dentro de la piedra natural (mármol y granito) y por otra lado dentro de la piedra artificial (compac, silestone y la nueva superficie porcelánica como por ejemplo de neolith).

PIEDRA NATURAL

En primer lugar mencionamos el mármol, el cuál está formado por piedras calizas que tras el paso del tiempo y un proceso de altas temperaturas y presiones, consigue alcanzar un alto grado de cristalización. Los beneficios más característicos de este material son la resistencia, la durabilidad al paso del tiempo, la limpieza e imagen elegante que ofrece, siendo desventajas la porosidad que tiene (igual que toda piedra natural) y delicado cuidado a tener en su uso para evitar ralladuras, roturas y absorción de líquidos con sus consecuentes manchas.

El granito también es un material bastante empleado en la fabricación de islas y encimeras, siendo un material que no tiene una forma específica de formarse. Sus propiedades físicas y químicas presentan ventajas como dificultad de arañar, resistencia a altas temperaturas, durabilidad excelente y mantenimiento escaso. En el lado de los inconvenientes, mencionamos  su porosidad a absorber líquidos. Otro aspecto destacable es la multiplicidad de colores y acabados que existen en el mercado.

PIEDRA ARTIFICIAL

COMPAC es una marca que fabrica encimeras con materiales de alta calidad, cuya materia prima principal es el cuarzo, que compone alrededor de un 90% de sus piezas. Los pros que tiene este material son su bajo grado de porosidad, por lo que permite su fácil limpieza, su alto nivel antibacteriano y su resistencia a golpes, rayaduras y humedad. La contra más importante es su poca resistencia al calor.

Destaca de este material, la gran diversidad de colores y acabados de los que podemos disponer y que dan a tu cocina un toque de personalidad diferente al resto.

SILESTONE presenta al mercado un material con gran variedad de colores y acabados, que permite adaptarse a cualquier estilo de cocina. Este es un material compuesto por un 94% de cuarzo natural compacto y un 6% de resina de poliéster y otros materiales que le aportan distintas características. Las ventajas más llamativas son su baja porosidad, resistencia a impactos, protección antibacteriana y la multiplicidad de usos que presenta.  No todo son ventajas pues no presenta una resistencia limitada a altas temperaturas – al igual que compac.

Neolith es un material revolucionario que combina materia prima de calidad con una tecnología avanzada, por lo que el resultado es innovador y atractivo. Las superficies de Neolith destacan por su resistencia, perdurabilidad, estabilidad química y belleza. La desventaja que presenta es la posibilidad de dañarse si se somete a presiones excesivas o usos indebidos, a pesar de su fabricación a altísimas temperaturas y presiones.

Por último, os dejamos unas imágenes de islas/penínsulas en cocinas, que esperemos os puedan servir de inspiración si tenéis en mente instalar este elemento con los materiales comentados en vuestras cocinas.

– Isla con frontales y encimera de Corian Glaciar White.

– Isla lacada con tonalidades en beige claro y encimera de granito blanco perla.

– Cocina con encimera y península.

– Isla con mobiliario lacado en blanco brillo/mate junto a encimera y campana extractora de Pando.

– Isla fabricada con revestimiento de acero inoxidable con zona de aguas y estantería en su interior.

– Isla con doble altura combinando diferentes materiales como son la encimera de mármol blanco y la encimera de madera natural con apoyos metálicos lacados al horno.